El Orador del deporte

FÚTBOL > PARTIDO AMISTOSO

El Sentmenat sucumbe al poderío del Castellar

·Los visitantes se llevan uno de los derbis más morbosos que se recuerdan 

·El Sentmenat consiente la exhibición del conjunto verde en el primer tiempo 

·Los azulgrana reaccionan tras el descanso

Toni Canyameras Rojas

El Sentmenat salió derrotado del derbi vallesano ante el Castellar del Vallés por un claro 1-9 en el partido amistoso que se disputó en el Camp Municipal de Sentmenat.

Rara vez un encuentro de esta calibre centrará tanto interés. No por la tradicional rivalidad existente entre ambos equipos. Cosas del fútbol, la condición de este amistoso tenía otras connotaciones más allá de la empleada en el argot balompédico. Y es que hasta siete jugadores de los visitantes- David López, Aleix Nogué, James Sarret, Daniel Fuentes, Sergio Gómez, Adrián Mallen y Dani Márquez-, han nacido y se han criado en Sentmenat y han pasado por las filas del club presidido por Josep Morral. Todos ellos han compartido algún momento de su vida con futbolistas azulgrana. Por si fuera poco, duelo de amigos íntimos en el banquillo: el jugador del Hospitalet, Aday Benítez, nativo también de Sentmenat, contra Joan Veraguas. En pocas oportunidades como esta se podía garantizar aquella frase: el morbo está servido.

Los espectadores que se acercaron al campo, tan valientes ellos, osaron desafiar al frío y acercarse al campo para ver uno de los derbis más llamativos de los últimos tiempos. La pasión que despertó el duelo más el entusiasmo que se palpaba en el público eran el mejor combatiente a la gélida noche que se anunciaba en el pueblo vallesano. No defraudó el partido. Cada uno sacó lo que se esperaba de ellos. El Castellar un conjunto de Primera Divisón juvenil que disfruta tratando bien el esférico. El Sentmenat, un equipo voluntarioso a más no poder y cada vez mejor trabajado –lo demostró especialmente en el segundo tiempo- al que, como destacó Veraguas en rueda de prensa, le falta aún ‘’rodaje’’ para explotar todo su potencial.


El Castellar exhibe su vendaval de fútbol en la primera parte

Quien no acabó de entrar en calor fueron los locales. Los azulgrana se empeñan en cometer los mismos pecados partido tras partido y en convertir en inútil la siempre tardía reacción que llega en el segundo tiempo. Con independencia de la calidad de uno y otro, hay un abismo entre un equipo que empiezo dormido y otro que lo hace a mil revoluciones como arrancó el Castellar, que metiéndose en ese segundo papel trituró al Sentmenat.

Los pupilos de Aday Benítez, que alineó un once repleto de suplentes -tan sólo jugaron David López y Carlos Raya de los habituales-,  movieron el balón con tal velocidad y fluidez que pareció que vestidos  con su uniforme verde se camuflaran en el tapete para que el rival no la viera. Los azulgrana la vieron pero les costó horrores seguirla. Dejándose llevar por la inercia del choque y quizá el respeto por el adversario que se hallaba enfrente, se fueron metiendo atrás hasta terminar embotellados. Los de Veraguas no anduvieron muy lejos de la buena colocación pero concedieron algunos espacios siempre imperdonables si jugadores como David López o Aleix Nogué los ocupan. Estos dos sentmenatenses pusieron aún más picante a un asalto ya de por sí morboso y se erigieron en protagonistas del primer tiempo. López dirigió y Nogué machacó el marco azulgrana con un triplete. Primera parte para olvidar, resultado pésimo (0-7). La lógica nunca falla.

Y llegó la reacción azulgrana

Pero empezó la segunda parte, el tramo preferido del Sentmenat. Y aparecieron los azulgrana. Y justificaron por qué hay que tener en cuenta a este equipo. Sin robarle el balón al Castellar- los verdes no desistieron de su juego de toque y de su presión arriba-, los locales protegieron su área como si de oro se tratara y oscurecieron la imaginación ofensiva de su oponente. Veraguas insistió a sus hombres en tapar los pasillos interiores y sus pupilos le negaron cualquier hueco al Castellar por esa zona. En esa tarea estuvieron grandes Ariel Vera y Pau Blanco, que cumplieron con brillantez ese cometido. Si el equipo de Aday fue superior en el primer tiempo, Joan Veraguas supo arreglar el desaguisado y superó a su colega en la segunda mitad, empatando el desafío particular de entrenadores.

El Castellar, pese a anotar dos tantos más en el segundo tiempo, se atrancó. Ariel Vera adornó el derbi con inverosímil golazo de chilena. Pero lo importante es que el Sentmenat consiguió que todo un equipo de Primera casi no triangulara más de tres pases en ese segundo tiempo. Y es que cuando se lo propone este equipo es capaz de esto y más a pesar de sus malos comienzos. Ver para creer.