El Orador del deporte

TORNEO DE PÁDEL DE SENTMENAT > PRESTIGIOSA VICTORIA DE LOS HERMANOS

Los Rojas se hacen fuertes

·Los extremeños vuelven por sus fueros para sellar su ascenso al grupo élite 

·De nuevo aparecen los problemas para cerrar los encuentros 

·La fortaleza mental de los calzadilleros en los 'tie-break' decide

Los calzadilleros, voleando

Toni Canyameras Rojas

La pareja formada por Toni Rojas y Luis Miguel Rojas sentenció su ascenso al primer grupo del campeonato de pádel de Sentmenat, después de imponerse a Toni Albacete y Manolo Jiménez  por un ajustado 7-6 (5) y 7-6 (6), tras una hora y 45 minutos de juego. Era el partido correspondiente a la tercera jornada de esta liguilla 2, suspendido el pasado jueves por los problemas familiares de Jiménez.

Los hermanos Rojas se encontraban ante un importante punto de inflexión. Ganar o perder. Salir reforzados o debilitarse aún más dentro del bache de juego en el que cayeron tras la derrota ante Bombín y Salazar. El desenlace, además de ser feliz, fue recuperar su mejor versión para espantar esos fantasmas y asegurar un puesto en la élite del pádel sentmenatense en la siguiente vuelta. No podía ser de otra manera.

Y es que la victoria adquiere un valor incalculable por la entidad de los rivales. Si el improvisado compañero de Albacete era un gran jugador, Jiménez no lo fue menos. Ambos, como si de emular a los extremeños se tratara, plantaron el muro en la otra mitad de la pista y convirtieron el duelo en un choque de paredes. La pelota enfermó de locura y fue de un lado a otro sin parar, en busca de esa grieta en la que infiltrarse para interrumpir los intensos peloteos que el encuentro deparó. Cada punto -eterno, larguísimo, interminable-, formaba parte de las batallas que había que ganar para erigirse en vencedor de esta durísima guerra. Total, si ganar los intercambios eran caros, los errores también se pagaban a un precio de oro.

El espíritu de los calzadilleros, el factor desequilibrante

Luis Miguel y Toni fallaron menos sin derrumbarse, aunque la desesperación les tentara, y ahí radicó la diferencia del partido, que no varió ni un ápice su guión, y siempre marcado por la igualdad. Los extremeños jugaron con paciencia, aguantaron como titanes los bombardeos de los contrincantes, y eligieron bien a la hora de apretar. Por contra, volvieron a  acusar sus dificultades para imponerse en los momentos decisivos. Así sucedió en el primer parcial en el que dispusieron de un 5-3 para adjudicárselo. No aprovecharon esa ventaja y sería su mayor determinación en la muerte súbita, llegando a salvar una bola de set, la que les otorgaría esta manga inicial.

Mismo cantar

Algo parecido acaeció en el segundo set. Los calzadilleros supieron ir a remolque -Toni y Manolo empezaron sacando y siempre llevaron la voz cantante en el luminoso hasta que llegó la rotura de servicio-, pero dejaron escapar un 5-4 con saque para poner el finiquito. Sin embargo, esa fortaleza mental que echaron en falta en ese momento la sacaron a relucir en otro ‘tie-break’ para remontar un 5-2 adverso y levantar los brazos por tercera vez en Sentmenat.

El calendario no da tregua y mañana tendrán que vérselas a las 18:30 horas con Josep Ramoneda y Jesús Zafra, antiguo compañero de Albacete. Será el ultimo partido de los extremeños antes de afrontar la segunda vuelta, ya en el grupo de los mejores.